Presentación

Este sitio recoge los contenidos de un curso, una introducción a diversas cuestiones de la investigación científica particularmente centradas en su comunicación.

Obviamente es un blog, pero su uso está un poco forzado, las entradas no siguen un orden cronológico sino temático. Las fechas de publicación están "trucadas" para que ocurra eso.

Para navegar por los contenidos se dispone del índice del curso en forma de "etiquetas" (a la derecha de este texto, bajo el logo. En caso de pérdida, pinchando en el título del blog se vuelve a esta página.



Contenidos:

1.- Aspecto social de la ciencia (Intro)
- Dentro de la "definición vectorial" los aspectos sociales:
     * El más esencial --> Kuhn
     * El papel Económico --> motor económico de las sociedades avanzadas (de todas en realidad)
     * El papel social --> Aumento de la esperanza (y calidad) de vida, anticoncepción, ...

2.- El aspecto ético de la ciencia
- Fraude científico
- La "crisis de reproducibilidad"
- Buenas prácticas

3.- Sistemas Ciencia Tecnología Sociedad
- Los aspectos sociales conforman un "sistema"
- La ciencia como sector económico productivo

4.- Elementos específicos de la gestión del conocimiento como valor económico
- Propiedad intelectual vs. propiedad industrial

Aspectos sociales de la ciencia. Introducción

Definir la ciencia es algo complicado y que tiene muchos puntos de vista. Podemos aproximarnos a ello con una definición poliédrica (o vectorial). [Ya lo vimos, pero para quienes no cursaron la asignatura previa, se incluye el texto correspondiente en la siguiente entrada].
 
Varios de estos aspectos tienen un claro componente social. Esos son los que más nos van a interesar en la asignatura que tratamos en este sitio.

Seguramente la aproximación más esencial a lo que es ciencia la encontramos en la filosofía de la ciencia. Dentro de ella, una de las posturas estrella es la que planteó Thomas Kuhn en su "Estructura de las revoluciones científicas", en la que señala la importancia del consenso entre científicos para establecer el "paradigma" vigente en un momento dado. Profundizamos un poco en esto con una entrada sobre filosofía de la ciencia y una sobre Kuhn.

Es fácil ver también la importancia de la ciencia, especialmente a través de sus aplicaciones tecnológicas, en el desarrollo económico y social de los países. La producción industrial está basada en patentes, innovación en productos que tiene lugar gracias a la actividad investigadora tanto de los departamentos de las empresas como en organismos públicos (dependiendo de que sea más básica o aplicada). Por su parte, la bomba atómica o la disponibilidad de métodos anticonceptivos seguros y baratos (entre una miríada de posibles ejemplos) han cambiado por completo las dinámicas sociales a todos los niveles. Ciencia, tecnología y sociedad conforman un sistema (bastante complejo, por cierto) con diversos agentes, modelos de funcionamiento e indicadores. A esto dedicaremos una serie de entradas con la etiqueta "(3) Sist. CTS".

Ese sistema CTS también podemos verlo como un sector económico productivo. Este sector estaría basado en el conocimiento innovador. Nos asomaremos a la gestión de dicho conocimiento con unas pocas entradas que nos ayuden a comprender y reflexionar sobre la propiedad industrial (patentes). Las identificaremos con la etiqueta "(4) Pat".

Pero antes de entrar en el desarrollo de esos aspectos sociales dedicaremos unas entradas (el "tema 2") a lo que podríamos llamar aspectos éticos de la ciencia: el fraude científico y sus implicaciones. Un asunto menos anecdódico e inocente de lo que puede parecer a priori.

Así pues, a partir de aquí se encuentran las entradas que desarrollan los 4 temas comentados:
(1) Filosofía
(2) Fraude
(3) Sis. CTS
(4) Patentes

Ciencia, una aproximación "vectorial".

Qué es ciencia es, sin duda, una cuestión muy complicada con múltiples ángulos. De hecho no creo que se pueda dar una única definición, un escalar, valga la broma. Con una definición vectorial, sin embargo, podemos quizá recoger las distintas dimensiones en las que utilizamos habitualmente la palabra "ciencia". Sirva la figura 1 como una primera aproximación a dicha definición multicomponente de la palabra.



De este modo podemos entender que haya científicos no profesionales, que cumplirían la dimensión "actitud vital" pero no la "actividad profesional". Las dimensiones "actitud vital", "conocimiento especial" y "cuerpo de conocimientos" son las que podemos rastrear hasta los orígenes de la actividad científica, probablemente unida a los orígenes del hombre. Sin embargo las dimensiones profesional e industrial son relativamente recientes, del siglo XX podríamos decir. La dimensión social habría aparecido a medio camino, en la medida en que los científicos formaran comunidades, mucho antes del SXX.


Una forma alternativa de acercarse a una definición es en negativo, definir lo que no es, de forma que el complementario se aproximaría a lo que buscamos. ¿Qué podríamos decir de lo que no es ciencia? Queda resumido en la figura 2.


Vemos también diferentes tipos de enunciados respecto de lo que no es la ciencia. En cuanto al tipo de conocimiento no es el que se deriva de presupuestos inmutables (por ejemplo de la fe) no el que se ha demostrado incierto (mentira). Otra cosa es que no se pueda establecer que un enunciado sea verdadero, pero si se puede establecer que sea falso, y entonces no formará parte del cuerpo de conocimientos que es la ciencia (en una de sus dimensiones). Tampoco enunciados vacíos, ejercicios de lógica vacía y nominalismo confuso (elucubraciones o imposturas intelectuales) forman parte de ese cuerpo de conocimientos especia que llamamos ciencia. Por otro lado, hay actitudes vitales hacia la naturaleza diferentes de la científica, y algunas son tan interesantes y humanas como aquella. Lo mismo se puede decir respecto de las actividades intelectuales.

Esta visión tan sintética (y en cierto modo parcial y operativa) de la ciencia se puede completar y ampliar con las visiones de otros autores y puntos de vista recogidos como entradas en otro blog, aquí. Recomiendo echar un vistazo al menos.

Filosofía de la ciencia

En un excelente texto de César Tomé, muy breve para lo que incluye, se expone la importancia de la concepción filosófica de la ciencia y se repasan los principales hitos históricos de la misma. Copio a continuación los primeros párrafos y dirijo al texto original. Merece la pena.


"Afortunadamente la ciencia, como la naturaleza a la que pertenece, no está limitada ni por el tiempo ni por el espacio. Pertenece al mundo, y no es de ningún país o época. Cuanto más sabemos, más sentimos nuestra ignorancia; más sentimos cuánto queda desconocido; y en filosofía el sentimiento del héroe macedonio nunca puede aplicarse: siempre hay nuevos mundos por conquistar."

Esta cita pertenece a un discurso que Humphry Davy, uno de los más eminentes científicos del siglo xix, dirigió a los miembros de la Royal Institution en 1825. En este breve texto se ponen de manifiesto, por una parte, la fe en un progreso sin límites para la ciencia y la paradoja del conocimiento, cuanto más conocemos más somos conscientes de lo que no sabemos y, además, lo desconocido parece ser cada vez mayor que lo que se conoce. Pero, cabría plantearse, ¿en qué consiste el progreso científico? ¿realmente es ilimitado? Y ya puestos, ¿es racional? Estas preguntas podrían parecer intrascendentes para la investigación científica como tal, esto es, el investigador buscará sus resultados independientemente de si existe el progreso en ciencia o no, otra cosa esque sus posiciones filosóficas le influyan más de lo que está dispuesto a reconocer. Pero, tal y como nosotros lo vemos, no son intrascendentes en absoluto ...

Los paradigmas de Kuhn

Todos hemos oído que para ser innovadores hay que pensar “fuera de la caja”. En ciencia también es cierto que para conseguir avances significativos hay que pensar más allá de lo establecido. Pero ¿qué es exactamente “la caja” fuera de la cual hay que situarse?

Esta caja se puede identificar con el paradigma, el concepto central de Thomas Kuhn en su teoría de las revoluciones científicas. Kuhn plantea una evolución de las disciplinas científicas (una vez establecidas como tales) en las que se alternan períodos de “ciencia normal” con momentos de revolución.

En las fases de ciencia normal la comunidad científica asume de forma consensuada un conjunto de teorías que conforman “el paradigma” científico del momento. La tarea en estas fases consiste en ir intentando explicar cuestiones novedosas en el marco del paradigma vigente, o dicho de otro modo, ir extendiendo el ámbito de validez del paradigma. En esta tarea van apareciendo casos que no encajan, anomalías. Mientras no son demasiadas pasan desapercibidas pero a medida que la cantidad de anomalías aumenta, puede dar lugar a una situación de crisis que se supera con la creación de un nuevo paradigma. El nuevo esquema es mejor que el anterior dado que debe explicar las mismas cosas que el anterior más las anomalías, o al menos buena parte de ellas.

Merece la pena ampliar un poco este resumen tan sintético de "La estructura de las revoluciones científicas" de Kuhn, por ejemplo echando un vistazo a las entradas de la Wikipedia del autor y de la obra:
Thomas S. Kuhn
The Structure of Scientific Revolutions

Fraude científico

Aun acostumbrados a las debilidades humanas, nos resulta especialmente repulsivos las violaciones relacionadas con la profesión del delincuente: un pirómano de profesión bombero, un delincuente sexual sacerdote o un mentiroso de profesión científico.

Nadie duda que los científicos son humanos, es tal obviedad que da vergüenza escribirlo, y de esa humanidad esperamos cualquier tipo de comportamiento non santo menos uno: el fraude en sus resultados científicos. Discutíamos en el tema primero que ser científico es una profesión pero es también una actitud vital. En el primer sentido no extraña el fraude, pero en el segundo es intolerable, aun impensable.


Sin embargo se da, y se da más de lo que pudiera parecer. Un libro muy interesante que analiza este asunto es el de Federico di Trocchio "Las mentiras de la ciencia", en el que desgrana desde un punto de vista histórico, con mucha documentación, un buen montón de casos.


Nosotros, de momento, nos vamos a conformar con texto algo más limitado, un artículo de Mundo Científico (del que hay una versión resumida libre en la red).

Seguro que se pueden encontrar muchos textos interesantes más...

Una variante del fraude es el plagio, ¿para qué preocuparse de falsificar resultados experimentales pudiendo copiar directamente los artículos? Por sorprendente que parezca, las revistas ponen notas en las publicaciones indicando que eso no es una buena idea. El avance tecnológico ha generado herramientas antiplagio, existen aplicaciones que comparan un texto con documentación que hay por la red y evalúan automáticamente las similitudes. Hay revistas que incluso obligan a pasar un test de este tipo en el proceso de envío de originales. Es interesante ver la cantidad de sitios que aparecen buscando "plagiarism checker"... (aquí una revisión de algunas en 2021)

Se ha destapado un caso muy ilustrativo en el que se ha detectado un caso de plagio, se ha abierto una investigación y se ha terminado por ECHAR LA CULPA AL BECARIO, aunque había más firmantes, estos quedaron exonerados por su universidad. En el texto del enlace ya hay suficientes comentarios.

Actualización (Agosto 2013). Según algunos estudios recientes el número de artículos fraudulentos ha aumentado significativamente en las últimas décadas. No se cuanto de fiables serán esos estudios, habría que leerselos con detalle. La información sobre esos estudios (con enlaces a los mismos) se encuentra en este artículo de Materia.es.

Publicar resultados negativos (y el problema de no hacerlo)

Publicar_negativos
Supongamos que estás intentando pulir fibra óptica embutida en resina plástica con abrasivo de alúmina y no sale, ¿Que concluyes? Hay al menos  dos opciones: (i) No se puede pulir fibra óptica por ese procedimiento, (ii) no he sabido apañármelas para pulir la fibra con esos materiales. Vale que el ejemplo es muy personal, pero no me venía otro a la cabeza ahora. El asunto es general, cuando algo no sale no sabes si es intrínseco (eso no puede ser) o si es fruto de tu incompetencia (no has sabido hacerlo bien). Lo primero sin duda sería un resultado científico valioso, interesante para otras personas, útil para ahorrar mucho tiempo, incluso para reflexionar teóricamente sobre esa imposibilidad. Lo segundo es una muestra de incapacidad personal sin valor alguno. Puestas así las cosas ¿Se deben publicar los resultados negativos? Recientemente se ha presentado una revista destinada específicamente a ello, y en “La ciencia y sus demonios” se hacían echo de ello con un artículo que merece la pena leer.

La no publicación de resultados negativos se convierte en un problema esencial en las disciplinas que tratan temas más complejos (más que el ejemplo que he puesto al comienzo y similares). En problemas más próximos a los primeros principios, la "reproducibilidad" es el juez último: si las piedras caren para abajo, un experimeto negativo es casi seguro que fue un error, y la reproducibilidad del hecho real minimiza (o aún anula) el problema de la no publicación de resultados negativos. En las ciencias de la vida, por ejemplo, las cosas son mucho más complejas, y que un medicamento, fertilizante o similar produzca el efecto deseado o no, depende de muchísimos factores. En cada experimento se analizan algunos de esos factores intentando dejar fijos todos los demás (incluyendo su efecto en experimentos "blanco"). En estos casos los resultado negativos incorporan tanta información como los positivos. De hecho las valoraciones finales sobre la efectividad de los productos testados se basan en "metaestudios" (estudios sobre los estudios) en los que se analizan los resultados obtenidos por múltiples investigadores en diversas condiciones experimentales. Es obvio que la no publicación de resultados negativos desviará el resultado final hacia positivos... falsos.

Una de las soluciones propuestas para evitar el sesgo de la publicación positiva es el preregistro de experimentos: la conveniencia (eventual obligatoriedad) de que los experimentos que se vayan a realizar hayan de ser registrados con anterioridad (en algún tipo de repositorio abierto), de forma que ocurra lo que ocurra con el experimento se disponga de la información pertinente. Sobre este tema del preregistro (incluso analizando efectos secundarios perniciosos y como minimizarlos) recomiendo leer este comentario de "neuroskeptic", especialmente centrado en psicología y neurociencias, pero extendible a todas las ciencias de la vida y a todas las ciencias en general.

Sobre toda esta cuestión, hay una estupenda charla TED de Ben Goldacre (un médico que se ha especializado en este problema). 20 minutos que merecen la pena:

Corregir errores, retirar artículos

A pesar de la revisión por pares, en lo que se publica se cuelan errores, errores menores, errores mayores y errores catastróficos que invalidan las conclusiones del trabajo original. Los errores menores se quedan a vivir en el artículo, los errores mayores pueden ser fuente del envío de una "corrección de erratas" y los errores verdaderamente importantes deberían conducir a la retirada del artículo, su "retracción". Como ya vamos viendo, en este mundo de la ciencia sobre hacer ciencia son objeto de estudio las cosas más sorprendentes, en este caso un estudio sobre si la retirada de artículos es coherente con la que debería esperarse. Otro trabajo breve sobre lo mismo, por otro autor, AQUÍ

Sobre los distintos niveles de corrección de errores (desde la fe de erratas a la retirada total) se pueden ver AQUI lo que proponen en la Biblioteca Nacional de Medicina (USA). Como ya sabemos, hay quien propone publicar incorrecciones para forzar una corrección de erratas, con lo que uno se hace con dos publicaciones a partir del mismo trabajo, dado que asume el autor que la fe de erratas tiene la consideración de una nueva publicación.  [Esto último era una broma, no vaya a ser que alguien no haya notado la ironía]

Parece que el tema del número de artículos retractados genera mucho interés. Se ha publicado recientemente un estudio que encuentra una correlación clara entre el número de artículos eliminados (medido con un índice de "retracción") y el índice de impacto de la revista. El artículo es de la revista Infection and Immunity, y está en libre acceso. Inicialmente he visto la reseña del trabajo en esta entrada de Francis, dónde se resume muy bien el artículo. ¿Se os ocurren hipótesis que expliquen esa correlación?

(Oct 2011) Y más trabajos sobre la retracción de artículos, de nuevo Francis recoge en una entrada las posibles razones que llevan a los editores a evitar la retracción de artículos. Además de la propia entrada, se referencian una serie de artículos sobre el tema (de buenas revistas) cuya revisión puede ser objeto de un trabajo interesante. No me resisto a copiar la siguiente gráfica, aunque no se muy bien de dónde sale no cómo se han calculado los datos.
Merece la pena echar un vistazo a esta divertida lista de los mejores 10 artículos retirados en 2013 (por J.M. Mulet)